Ensayo 1: Moda: Pertenecer o Diferenciarse

Carolina Guerrero
Temas en Comunicación y Arte Contemporáneo
Hugo Burgos
19 / Ene / 2009

Moda: Pertenecer y diferenciarse

”La moda y el vestir guardan una compleja relación con la identidad: por una parte la ropa que elegimos llevar puede ser una forma de expresar nuestra identidad […]; por la otra, nuestra indumentaria no siempre se puede "leer", puesto que no "habla" directamente y, por consiguiente, está expuesta a malas interpretaciones.” (Entwistle, 141) Refiriéndonos a lo que vestimos, sabemos que nuestra apariencia es una de las principales características que nos clasifica en diferentes grupos a los que la sociedad denomina “subculturas”. Una subcultura muy representativa en la actualidad es la de los Emos. La tensión en el mundo de la moda entre pertenecer a un grupo y diferenciarse de los demás, es compleja, y escogí a los emos como uno de los mejores ejemplos, pues su apariencia, ideología, preferencias, y modo de vida en general, se puede comparar fácilmente con cualquier otra subcultura.
”El término "Emo" fue utilizado casi exclusivamente para describir un tipo de género y modo de vestir que predominó en los años 80 y 90 y que en la actualidad, adolescentes entre 12 y 19 años, han retomado.” (Reyes, Niños Emo) Su seudónimo se origina de la palabra Emotive; Son jóvenes que viven aislados y para los cuales el sufrimiento se convierte en su estilo de vida. “Las subculturas dependen de tipos de conocimientos y de conducta concretos y requieren ciertas formas de ser”. (Entwistle, 170) Para ser emos, los chicos deben ser completamente depresivos, incitarse el dolor, sacrificarse para saturar el sufrimiento con más sufrimiento y deben hacer cosas que expresen su protesta contra el mundo, como dejar de comer.Tenemos claro que “la constitución de una identidad siempre se basa en la exclusión de algo” (Hall, 19) y pienso que podemos relacionar esto con el grupo que estoy analizando, porque los emos al considerarse incomprendidos, pretenden apartar la felicidad de su lado y catalogan al suicidio como una de las principales salidas a la vida llena de dolor que aparentemente llevan. Su moda se ve plasmada en dos colores básicos: negro y fucsia, con los que expresan su lado fuerte pero también su lado sensible. Los piercings, accesorios y prendas con diseños cuadriculados, calaveras, corazones, y estrellas, forman parte de su llamativo vestuario. Además, usan el cabello completamente liso cubriendo la mitad de su rostro, porque creen que así lograrán ocultar su lado sensible y lleno de tristeza.
“El estilo de la subcultura expresa temas o problemas particulares que preocupan a los jóvenes y que intentan resolver.” (Entwistle, 168). Los emos sufren por la pobreza, las injusticias, la discriminación, y en sí, por todos los problemas del mundo. Supuestamente buscan pasar desapercibidos con su dolor pero es imposible, pues la imagen que proyecta un emo es característica de los miembros de este grupo. “El movimiento emo se ha vuelto más visible y ha generado controversias, la más grave, es que desde hace algunos meses, en varios espacios cibernéticos (HI5, my space, you tube, etc.); se desató una campaña “antiemo”, que tiene como propósito agredir de manera física y verbal a estos jóvenes, por el hecho de vestirse de esa manera y por reunirse en espacios públicos, donde también lo hacen otros jóvenes.” (Nerio, Culturas Derechos Humanos)
”Los Emos son […] jóvenes que en la actualidad caminan por las ciudades del mundo, quizás como un fenómeno social de la creciente globalización, donde la juventud busca de urgencia una identidad de comunidad del planeta.” (Reyes, Niños Emo) Los emos han decidido pertenecer a una subcultura para diferenciarse de los demás; escogieron a su grupo como la mejor opción, porque se sienten identificados con sus preferencias y particularidades. Al igual que cualquier otra subcultura, se basan en su propia ideología y actúan en base a las normas que ésta establece. Al pretender diferenciarse del resto de la sociedad, han decidido pertenecer a un grupo específico conformado por miembros que se relacionan, y a la final es así como todos nos proyectamos; Pertenecemos a un grupo establecido, adaptamos su apariencia a nuestro aspecto, y sólo nuestra esencia es la que nos diferencia dentro de una sociedad conformada por millones de subculturas.

Pienso que actualmente todos tenemos la libertad de pertenecer al grupo con el que nos sentimos más identificados. A pesar de que algunas subculturas se manejan bajo teorías desordenadas, los miembros de cada subcultura deciden a qué grupo quieren pertenecer y, por ende, es su obligación conocer con qué ideologías se verán relacionados a partir de su integración al grupo que prefirieron.

Bibliografía. Entwistle, Joanne. El Cuerpo y la Moda: Una visión Sociológica. Barcelona: Paidós, 2002.
Hall, Stuart. Cuestiones de identidad cultural. Buenos Aires: Amorrortu editores, 2003.
Nerio, Ana Luisa, Angélica Gay y Salomé Almaraz. Culturas Juveniles y Derechos Humanos: Emos. (04.04.2008) (15.01.2009) (http://www.derechoshumanos.org.mx/modules.php?name=News&file=article&sid=798).
Reyes, Oscar. ¡Niños en la cultura de la depresión Emo!. Diario EL Extra. http://www.extra.ec/noticias.asp?codigo=20080723165131.